Una de las cosas que tememos a los 50 años
A cierta edad de la vida empezamos a tener problemas de salud ya sea por la vejez o por nuestra alimentación o por una u otra razón. Sin embargo, la sexualidad es un tema que sigue siendo tabú para algunas personas. Entre los problemas en cuanto a la sexualidad, a menudo tenemos problemas de eyaculación precoz, problemas de erección o incluso problemas urinarios. Por lo tanto, es obvio que estos problemas preocupan a los hombres especialmente a partir de los 40 años. Según estudios realizados en esta dirección, una de cada tres personas sufre impotencia sexual a los 40 años y una de cada dos personas a los 50. A menudo se confunde entre la impotencia sexual que es la dificultad para mantener una erección suficiente para tener relaciones sexuales y la eyaculación precoz que es el hecho de eyacular muy rápido. Además, la impotencia masculina a menudo se confunde con la esterilidad.
Ahora surge la pregunta de cómo resolver este problema. Se proponen varios métodos, a saber, pastillas, tratamientos tradicionales, afrodisíacos o incluso ejercicios físicos. Es importante conocer las causas de la impotencia masculina antes de poder poner en marcha una estrategia para recuperar toda la potencia. Entre las causas de la impotencia sexual se encuentran la ansiedad, el estrés, los problemas maritales, las drogas, el cigarrillo y el alcohol. A estos se suman productos industriales y químicos porque contienen sustancias que inhiben las hormonas sexuales. Lejos aún, estos alimentos industriales a veces contienen benceno (crea alteraciones en el ciclo hormonal) como lo ha demostrado la investigación. Es importante tener en cuenta también la obesidad que también causa impotencia sexual debido a la grasa que afecta la calidad de la erección. Los accidentes que han afectado a la médula espinal, los problemas cardiovasculares también son factores a tener en cuenta.
Es urgente tomar en serio este problema porque a priori al no tener consecuencias en la salud, puede afectar tu vida en pareja. Tu pareja estará harta después de un tiempo porque ya no está satisfecha en la cama. Pero no se asuste, hay maneras de recuperar su virilidad. Para ello, podemos citar el caso de los ejercicios que permiten al hombre estar de pie en posiciones que aumentan la intensidad de la erección gracias a una mejor circulación de la sangre por las venas. Este método es mucho más recomendable porque es natural y no tiene efectos secundarios. Luego, están, como se mencionó anteriormente, los tratamientos naturales a base de plantas de origen africano o asiático. La ventaja de estas plantas es que aportan sustancias que permiten que los riñones sean cada vez más sólidos y con ello la formación de una buena estructura de los músculos y tejidos del pene. Además, algunas personas recurren a afrodisíacos o pastillas que son solo problemas a muy corto plazo. Por otro lado, las dos primeras soluciones que tienen como objetivo restaurar la potencia sexual, es decir, curarse de este problema y volver a encontrar una sonrisa.