La atrofia testicular es el término médico que se usa para referirse a los testículos reducidos. Los testículos son órganos incluidos en el aparato reproductor masculino y están contenidos en una especie de bolsa que lleva el nombre de escroto. Los testículos regulan la producción de esperma y la de hormonas sexuales masculinas. La reducción de tamaño de uno o ambos testículos depende de la gravedad y duración de la atrofia. Este trastorno puede ser causado por diferentes factores, estos incluyen desequilibrios hormonales y el uso de ciertos medicamentos.
¿Cuáles son las causas y los síntomas de la atrofia testicular?
Los testículos contienen dos tipos de células, estas últimas regulan el funcionamiento de estos órganos: estas son las células germinales y las células de Leydig. Las células germinales regulan la producción de esperma y las células de Leydig regulan la producción de testosterona, la hormona sexual masculina. El cuerpo produce estos dos tipos de células en cantidades iguales durante el desarrollo testicular. Los testículos adquieren una forma redondeada y también se vuelven firmes y llenos gracias a estas células. La cantidad de líquido en los testículos puede disminuir si se reduce el número de cualquiera de estos dos tipos de células. Este cambio provoca la reducción del tamaño de los testículos. Los siguientes factores pueden causar atrofia testicular:
Desequilibrio hormonal: este trastorno es la causa más común de atrofia testicular. Estos desequilibrios pueden ser causados por el uso de ciertos medicamentos, la exposición a la radiación o el uso regular de esteroides. En caso de desequilibrio hormonal, el cuerpo reacciona como si tuviera suficientes niveles de hormonas sexuales, lo que limita la actividad de los testículos y hace que se encojan. Por lo general, es posible solucionar este problema interrumpiendo el tratamiento que lo causó, esto por supuesto depende de la gravedad de este trastorno.
Enfermedad: El virus de las paperas y el VIH pueden causar atrofia testicular. Este problema puede resolverse mediante el tratamiento eficaz de estas condiciones, pero esto obviamente depende de la gravedad de la atrofia.
Alcoholismo: El consumo crónico de alcohol puede causar cirrosis del hígado, esta enfermedad también afecta los testículos y puede reducir su tamaño.
Edad: La atrofia testicular puede ser una consecuencia natural del envejecimiento y afecta con frecuencia a hombres que ya no están en edad fértil.
Los síntomas de la atrofia testicular incluyen:
– Dolor en los testículos – Esterilidad – Trastornos sexuales – Disminución de la libido
Establecer el diagnóstico de atrofia testicular
Si se sospecha de atrofia testicular, la primera consulta le permitirá al médico conocer los factores externos que pueden provocar este tipo de trastornos, como el uso de esteroides o ciertos medicamentos. También le preguntará al paciente sobre su estilo de vida y su pasado sexual ya que las infecciones de transmisión sexual también pueden provocar este tipo de padecimientos. Luego realizará un examen físico para palpar directamente los testículos y verificar si hay cambios que puedan afectar el tamaño, la textura y la firmeza de estos órganos. El médico también examinará los genitales externos para buscar otros signos visibles. Se realizarán otras pruebas para confirmar el diagnóstico de atrofia testicular, estas incluyen:
– Una ecografía de los testículos que permite comprobar la calidad de la circulación sanguínea e identificar otras anomalías. – Un análisis de sangre para detectar signos de infección – Una prueba hormonal para detectar desequilibrios hormonales
Tratamiento de la atrofia testicular
El médico prescribirá el tratamiento más eficaz en función de las causas de la atrofia testicular. Si esta afección se debe a una infección de transmisión sexual, el tratamiento para esta afección generalmente tratará la atrofia testicular.
En la mayoría de los casos, la atrofia testicular se puede tratar cuando se trata de manera rápida y eficaz. Sin embargo, esta condición puede empeorar y causar daños irreversibles si no se trata durante mucho tiempo. Suele ser necesario recurrir a la cirugía para tratar ciertos problemas de salud que afectan con frecuencia a los hombres jóvenes, como la torsión testicular. El médico también puede recetar terapia de reemplazo hormonal y recomendar que el paciente cambie su estilo de vida y practique actividad física regular.