La falla del condón es algo común, que puede ocurrir en cualquier momento de la vida sin esperarlo. Cuando la pérdida de erección es recurrente, incluso sistemática, puede volverse insoportable y reducir a nada la sexualidad del hombre. Veamos en cambio las causas de tal avería y las formas de remediarlo.
• Colapsos sexuales de origen psicológico
El hecho de tener que interrumpir los juegos previos para colocarse un preservativo generalmente hace que desaparezca la excitación, y por tanto la erección que puede tener dificultad para reaparecer. Esta desventura puede generar angustia en el hombre que luego anticipa el fracaso, que sólo tiene como consecuencia contribuir a su repetición. Ponerse un preservativo se convierte así en un bloqueo psicológico asimilado a la ruptura sexual y no al placer.
Las soluciones para subsanar los fallos del preservativo de origen psicológico son relativamente sencillas. Primero, asegúrese de tener un condón a mano, incluso antes de que comiencen los juegos previos. Asegúrate de que haya un mínimo de tiempo entre el momento en que decides cubrirte y el momento en que te pones la protección. De esta forma, mantendrás tu erección y eliminarás el miedo a no verla reaparecer.
Fácil de decir pero menos fácil de implementar, trate de minimizar la situación. Si tus averías se convierten en una obsesión, corres el riesgo de empeorar la situación. Asimismo, no insistas demasiado en este tema con tu pareja para que su relación carnal sea lo más natural posible.
Una solución, bastante agradable, consiste en asegurarse de erotizar la colocación del preservativo. Por ejemplo, pídele a tu pareja que te siga acariciando mientras te proteges. Para que este momento se convierta en un momento de placer, no dudes en dejar que tu pareja tome el control. Al desenrollar el condón sobre su pene, estimulará su erección que no correrá el riesgo de caer.
Finalmente, cuando se ponga un condón, intente enfocar sus pensamientos en el placer que está a punto de experimentar y no en el fracaso que es probable que experimente. Este paso puede convertirse en un auténtico juego sexual más excitante que restrictivo, sobre todo si eliges preservativos estimulantes como los estriados, con cuentas o perfumados…
• Colapsos sexuales de origen físico
Algunos hombres simplemente no pueden soportar la "sensación de asfixia" que pueden causar los condones. Esta opresión tiene como consecuencia la reducción del flujo sanguíneo y, por tanto, la detención de la erección. Tampoco es raro sentir sensaciones de tirantez que, a la larga, hacen doloroso el acto sexual y provocan la ruptura sexual. Las causas también pueden provenir de la falta de sensibilidad provocada por los preservativos. Este último caso se encuentra sobre todo en hombres que ya lo han experimentado y que, hasta entonces, no utilizaban preservativo.
Para remediar una falla del condón de origen físico, es fundamental conocer con precisión la naturaleza de la molestia para elegir las soluciones adecuadas. Si sientes calambres cuando te pones un condón, que tienes la sensación de que el elástico comprime la base de tu pene y por lo tanto reduce el flujo de sangre, cambia a tallas XL, incluso XXL. Sin embargo, tenga cuidado de no usar una talla demasiado grande, ya que puede no permanecer en su lugar durante el acto sexual.
Si sufre de sensación de tirantez al usar un condón, primero asegúrese de no ser alérgico al látex. Si el problema no está ahí, lubrique el interior de la protección con un gel íntimo. Debes encontrar un agradable consuelo que te permita recuperar el gusto por el acto sexual sin aprehender el dolor.
Por último, si eres de los que no sienten ninguna sensación cuando se ponen el preservativo, intenta hacerte con las protecciones más finas posibles. Dependiendo de las marcas y modelos, el grosor varía considerablemente. No te quedes en un fracaso y multiplica las posibilidades de encontrar el preservativo que distorsione lo menos posible tu forma de hacer el amor.